A la hora de vender o alquilar nuestra casa muchas veces no nos damos cuenta de la importancia que tiene la primera impresión en el comprador. El home staging es una técnica de marketing aplicada a la venta inmobiliaria que fue furor en Estados Unidos y Europa y ahora llega a América Latina para quedarse.
¿Cuántas veces leemos la descripción perfecta de un departamento pero al ver las fotos lo descartamos por completo? ¿Cuántas veces visitamos una casa como compradores y nos genera un rechazo sólo por su decoración? El home staging busca eliminar todas estas barreras que el cliente percibe al ver una propiedad por primera vez. El nombre en inglés podría traducirse como una “puesta en escena” de la casa con el objetivo de que se venda mejor y más rápido. Esta técnica de marketing nació en Estados Unidos en los años ’70, momento en que el mercado inmobiliario tenía una gran oferta inmobiliaria y mucha competencia. Luego en los 90’ se expandió en Europa y ahora se está empezando a adoptar en más países.
Actualmente, estas técnicas adquieren aún más relevancia ya que la gran mayoría de los compradores ven las propiedades por primera vez en las fotos de los buscadores de inmuebles; por eso es tan importante la calidad de esa primera impresión. La pregunta es ¿cómo hacer para destacar tu propiedad entre 20 o 30 inmuebles similares? La respuesta hay que buscarla en las imágenes que son la primera puerta de esa futura casa.
Otra de las ventajas comprobada a lo largo de los años en los países que ya se ha implementado el home staging es la recuperación, y con creces, de lo que costó el procedimiento. Un arquitecto y experto en la materia, destaca que el homestaging no hay que pensarlo como un costo sino como una inversión porque aumenta el valor de venta del producto, “en el home staging sostenes el valor real de la propiedad”. Asimismo, otro plus es que las propiedades se venden más rápido, “puedo afirmar y está comprobado que la mayoría de las casas que intervine se vendieron, sí se multiplican los clics de las publicaciones de las propiedades que intervinimos”.
La casa que nos sirve para vivir todos los días no necesariamente debe ser la misma que mostremos a nuestros posibles compradores. Hay un par de principios básicos para potenciar su poder de atracción.
3 principios básicos
Despersonalización
La idea es que al ingresar a la propiedad, ya sea real o virtualmente, el potencial comprador pueda imaginarse a sí mismo viviendo allí. Para eso es importante sacar los objetos que nos remitan al dueño de la casa. Por ejemplo: fotos familiares, recuerdos personales, estilos de decoración muy llamativos, etc. En otras palabras, los ambientes deben verse neutros para que resulten agradables a distinto tipo de compradores.
Intervención del espacio físico
Hay que intentar mirar con ojos objetivos los espacios de la casa. En general, tenemos muebles innecesarios que achican los ambientes y se pueden sacar para mostrar mejor la propiedad. Quizás también sea necesario modernizar la decoración, pintar paredes de color neutro, seleccionar los objetos de decoración adecuados y el resto guardarlos. Hay que disponer bien los muebles para que se aprecien los metros cuadrados reales y los espacios de circulación del departamento.
Fotografía Estratégica
Este es el paso final pero no por eso el menos importante. En la actualidad la gran mayoría de los futuros compradores e inquilinos utilizan los buscadores de inmuebles en la web. Éstos están pensados para encontrar lo que se busca de la forma más rápida y práctica posible. Por eso los usuarios pueden seleccionar fácilmente las características que necesitan de un inmueble y ver sólo los que cumplen esos requisitos. Por lo tanto, lo que queda es diferenciarse con fotos atractivas de nuestra propiedad para lograr destacar entre tantas opciones similares.
Fuente: Comunidad Real Estate
